Los que quieren leer lo que se me ocurre escribir

lunes, 23 de enero de 2012

EL ACABOSE !!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

Bueno, pues ya está. Sí, sí, no me mireis raro, voy vestida de negro de pies a cabeza. ¿Quién me lo iba a decir? Bueno es que si alguien me lo dice no me lo creo, y además le atizo y fuerte.
Tessma (con dos eses) ha fallecido. Ya sé que esto os dejará con la boca abierta pero es tan cierto como la luz que nos alumbra.
Hace dos días, hacia las cinco de la tarde, le dio un corte de digesión, de esos malos, malos de verdad. Desde que no tenía que venir a la oficina, le había dado por dejarse llevar por sus instintos, (basicamente uno, el de comer hasta reventar), y salía de dos a tres cortes de digestión a la semana. Hasta el sábado había tenido suerte, siempre le había pasado estando acompañada, y, claro,todos los de la casa, incluido el servicio, estaban  ya hechos a esos percances y  sabían como atenderla sin pasar a mayores..
Pero el sábado, después de comer, la nena y el marido se fueron de compras, el servicio estaba de fin de semana, y ella, más que nada por aburrimiento, se apropió de la caja de rosquillas que Rosario (la cocinera) había dejado hechas.
Suponemos que con la intención de comerse alguna con el café. La encontraron desparramada sobre el sofá, abrazada la caja vacía, (podía contener hasta tres kilos de cualquier cosa), algunas miguitas perdidas entre la barbilla y su continuidad, pues ya era una línea practicamente recta con el resto de su anatomía, mirada de frente, los ojos uno mirando para Cuenca y el otro para Menorca, y sin repirar.
Total se murió sola, sin nadie que le cogiera la mano en semejante trance ni nada de esas cosas que a los vivos nos parecen  que  deben acompañar en trances tan duros. Murió harta de comida, pero sola..
La ceremonia estuvo bien, mucha, muchísima gente, su marido era Director de una Sucursal Bancaria, y tal y como están las cosas ultimamente, pues hasta los pocos clientes que les quedan fueron, más que nada para hacerse ver. Todo el mundo del despacho. Echamos el cierre. Eran muchos los años los que Tessma (con dos eses) llevaba con los Jefes. Entró joven, pobre y soltera, y mira, ahora, más mayor (muy finos ellos), con dinero y se había ido.
Eso de que que cuando alguien se muere, la gente diga "se ha ido", como si hubiera bajado a comprar pipas es algo que no entenderé nunca. ¡Coño! qué no se ha ido, que SE HA MUERTO, que se la han llevado los del Tanatorio y esos no devuelven nunca a nadie.
Personalmente me afectó más de lo que hubiera pensado nunca. No sé si por la muerte en sí, por la forma en que murió, o para ser sinceros, porque, entendía yo, que ahora su puesto y su sueldo iban a pasar a la nueva secretaria, que no podía ser otra que yo. Eso estaba claro, llevaba días haciendo el trabajo y todos me felicitaban.
Vale, vale, no quiero pensar en eso, estça feo. Decididamente me senté en la mesa de ELLA, y entré en faena.
Levanté la cabeza sorporendida al oir dos golpes suaves en la puerta, di permiso para entrar, y entraron. El Gran Jefe y una rubia de impresión, con una sonrisa de Clínica Dental y unas curvas de carrretera comercal.
Algo nervioso, todo hay que decirlo, el h......., del Gran Jefe, va y suelta,: "Le presento a Mónica qua a partir de ahora ocupará el puesto de Tessma (con dos eses) que tan solos nos ha dejado".
Mis manos se cerraban peligrosamente sobre la grapadora y la taladradora. Pero él a lo suyo: "Espero de usted que la ponga al corriente de todo y le sirva de tanta ayuda como lo era para ... y va el tío y ¡empezó a llorar!
No me lo podía creer, es decir, yo que llevaba años haciendo el trabajo de la finada, semanas de forma que todos comprobaron y ahora me traían una...una... no sé como llamarla, para que la enseñara yo, yo, y para que cobrara tres veces más.
No pude reprimirme, me levante de golpè tirando de paso la silla, la grapadora y la taladradora al suelo y mirando fijamente al hombrecito (era muy poquita cosa) aullé: Pues mire va a ser que no, si no sabe aprender ella sola que se j....., porque yo me voy ahora mismo, y si usted sabe lo que hay que hacer (que ya sé yo que no) pues la enseña.
Agaré el bolso y me largué. Ahora estoy merodeando por los alrededores a la espera de que salga Eva, la de Recursos Humanos, a ver como consigo arreglarlo para al menos cobrar la parte proporcional que me corresponda y a ver si me hace un apañó para el paro. Pero soportar a otra Tessma (con dos eses), más joven, más guapa, y con cara de mucho más idiota, eso no. Hombre, que una tiene su dignidad.
Por eso os digo que me voy con la música a otra parte, relajaos, sed felices y comed con prudencia.
Siempre os llevaré en mi corazón.
Davinia.

1 comentario:

  1. ¿Cómo te vas a ir ahora que se pone la historia más interesante? No no no no no!! De eso nada!!!

    (Solo de imaginar a la de las dos "s" desparramada, ojidifusa, con los pelos quemados y fluorescentes, las migas de rosquillas adornando tan cándido panorama... ¡hombre, no! ¡Digo, mujer, no!, ¡No nos dejes!)

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